Godofredo es padre de Harold y su esposo es
Jerusa. Él es un hombre bueno, pero muy preocupado por su trabajo y su familia.
Él trabaja en una empresa grande y vive en una ciudad con muchos habitantes. Un
viernes por la tarde, Godofredo salió corriendo del trabajo porque se había
acordado de recoger a su esposa e hijo para ir a pasar el fin de semana en la
playa, que estaba a pocos kilómetros de la ciudad donde vivían. Godofredo tenía
prisa porque quería llegar lo antes posible y disfrutar de la playa con su
familia. Así que Godofredo conducía a alta velocidad, más allá del límite. En un
apuro, decidió no parar en un semáforo en rojo y no se dio cuenta que otro
conductor cruzó la calle, también muy apresurado. Cuando trató de desviar el
carro, terminó golpeandose muy duro con un palo.
Una vez que abrió los ojos, Godofredo le pareció extraño ver que le dolía todo el cuerpo, pero se sentía bien. Y aturdido, incapaz de entender lo que estaba sucediendo, se fue a caminar a casa, sólo para decirle del accidente a la familia. Una vez que comenzó a caminar, se sentía confundido y no pudo encontrar el camino a casa. Godofredo camino desorientado por mucho tiempo, habían muchas calles y no sabia hacia donde dirigirse.
Finalmente, después de mucho tiempo, Godofredo volvió a casa. No sabía cuánto tiempo había pasado, pero estaba feliz de ver a su esposa:
La esposa, a sabiendas de que su marido había muerto en un accidente hacia unos días, se desmayó del susto al ver a su marido delante de ella.
- ¿Qué pasó querida? no estas alegre de verme? - Preguntó Godofredo, al tratar de revivir a su esposa.
Escucho voces en la casa, Harold, el hijo de Godofredo, que estaba viendo la televisión en la habitación, fue a ver lo que estaba sucediendo.
- ¡Papá! - Era justo lo que el niño podría decir!.
Harold cuando se dio cuenta que su padre, ya había desencarnado,y que estaba en la sala se desmayó del susto, también.
- Se desmayó del susto! ¿Por qué es? - Preguntó Godofredo, sin entender nada.
Godofredo no se dio cuenta de que su cuerpo físico había muerto y que había aparecido en espíritu a sus familias, asustándolos.
Y así, Godofredo fue caminando por la casa, preguntándose a sí mismo:
Godofredo, aunque un poco confundido, se sentía bien, dispuesto y lleno de ganas de ir a la playa. Como nadie respondió a sus preguntas, él continuó hablando y caminando alrededor de la casa:
Fuente: http://evangelizacao-infantil.blogspot.com Blog de Simone Anastácio BH, MG, Brasil Evangelizadora del Grupo de Fraternidad Espírita Irmã Scheilla (Centro Oriente) en Belo Horizonte.
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