PLURALIDAD DE MUNDOS HABITADOS 1

El Universo

Una noche, Andrés y su padre, don José, fueron a dar un paseo. Hacía mucho calor y decidieron disfrutar de la noche estrellada, para hablar en la plaza.

- Mira, Andrés, ¿cuántas estrellas vemos esta noche!

- Sí, papá! ¡Qué hermoso cielo! ¿Sabes padre, mi maestro dice que hay varios planetas distintos de la Tierra.

- Sí, Andrés. El universo es muy grande, es infinito y hay varias planetas.

- Todos son iguales a la Tierra?

- No, los científicos han descubierto, que son diferentes: algunos son más grandes, otras más pequeñas, en algunos muy fríos, muy calientes en los demás.

- Mira padre, la Luna esta hermosa el día de hoy, que brillo!

- Pareciera que estuviera cerca, ¿no? Pero ella y todos los otros planetas, están a miles de kilómetros de distancia de la Tierra. Para llegar allí, debemos ir en un cohete o en una nave espacial.

- ¿Hay otras personas que viven en estos mundos?

- Por supuesto, mi hijo! Dios no crearía un universo tan grande, lleno de estrellas y planetas para ser habitado sólo por nosotros. Además, ¿te acuerdas del evangelio de la semana pasada, donde se habla de los diferentes mundos? Mundos primitivos, el de Expiación y Prueba (la Tierra), los de regeneración, los mundos felices y los celestiales? Por lo tanto, podemos deducir que hay muchos espíritus en el universo, en diferentes etapas, las cuales viven en mundos diferentes.

- Yo quiero reencarnar allí en un Mundo Celestial. ¿Has pensado que bueno vivir en un mundo donde todos son buenos amigos, en el que nadie se enferma, nadie es pobre? ¡Ah! ¡Qué alegría sería!

- Seguramente debe ser una belleza, pero que no se olvide que los que viven allí han aprendido a ser buenos, para amar y para tener el corazón puro de verdad. Y eso toma un tiempo.

- ¿Cómo puedo tener un corazón puro de verdad?

- Ayudar a nuestros hermanos, compañeros de escuela, mamá, papá, ellos son el pozo de los deseos en realidad, no es golpear, pellizcar, ocultar los juguetes.

- Lo tengo, papá!

Andrés abrazó a su padre y por mucho tiempo miró el cielo y se preguntaba cómo era la vida en estos otros mundos, imaginando la grandeza y la bondad de Dios, capaz de crear algo tan hermoso y tan suave como el Universo.

Fuente:Livro Brincando e Aprendendo o Espiritismo Volume 1

Fuente: http://evangelizacao-infantil.blogspot.com Blog de Simone Anastácio BH, MG, Brasil Evangelizadora del Grupo de Fraternidad Espírita Irmã Scheilla (Centro Oriente) en Belo Horizonte.