Nosotros somos
Espíritus. Recibimos de Dios un cuerpo como instrumento de progreso, mientras
estamos en la Tierra, por eso debemos cuidarlo con mucho cariño, a fin de
cumplir los objetivos establecidos antes de reencarnarnos.
Es importante
amarlo, preservarlo e utilizarlo con nobleza para nuestro propio bien. Para
eso, debemos tener Buenos hábitos de alimentación, higiene, salud y hacer
siempre el bien de todas las formas que nos seas posible, pues EL CUERPO ES LA
MORADA DE NUESTRO ESPÍRITU.
¿Ustedes sabían que Jesús ayudó mucho con su cuerpo físico,y a nuestro planeta cuando estuvo en la Tierra? ¿Saben de qué manera?
Curaba con
las manos, abrazaba, hablaba palabras de cariño, contaba historias (parábolas),
hacia sermones (predicaciones), oía a aquellos que estaban afligidos,
miraba a todos los seres de la creación con mucho amor y respeto, caminaba
grandes distancias a pie, llevando su Evangelio a muchas personas.
¿Cómo los
niños pueden cooperar utilizando su cuerpo para que nuestro planeta sea más
feliz?
Haciendo las
mismas cosas que Jesús ha hecho. No podemos curar con nuestras manos como Jesús
curaba, pero podemos transmitir buenas energías a través de ellas y hacer todas
las demás cosas buenas que Jesús hacía con su cuerpo: hablar, escuchar,
abrazar. Podemos, también, leer buenos libros, hacer ejercicios, estudiar,
hacer oraciones, cuidar de la naturaleza, ayudar en casa, en la escuela y en la
evangelización. Repasar lo que aprendemos en las clases de evangelización a
otros niños e invitarles a participar.
Fuente: Blog de Simone
Anastácio BH, MG, Brasil Evangelizadora del Grupo de Fraternidad
Espírita Irmã Scheilla (Centro Oriente) en Belo Horizonte.
Imagenes tomadas de internet.
Imagenes tomadas de internet.
No hay comentarios:
Publicar un comentario