DIOS

Dios creó el mundo en que vivimos la tierra, el sol, las nubes, las estrellas, el agua, las plantas, las flores, el mar, los ríos, los árboles y los animales.  

 Él hizo todo eso para que sintamos su amor y para hacer del mundo un lugar bueno para vivir.

Decimos que Dios es nuestro Padre porque fue Él quien creó los seres humanos para que aprendan a ser personas buenas.   Dios nos creó con inteligencia para que podamos vivir en este mundo maravilloso y usar las cosas que Él creó cuando las necesitemos, como el agua y los alimentos.

El ser humano también hace muchas cosas modificando la naturaleza, usando la inteligencia.  El ser humano creó las casas, los carros, las ropas, la televisión, los muebles, los aviones y muchas cosas más.

Dios es sabio y bueno. Su sabiduría se revela en las obras de la creación. Dios provee las necesidades de todos los seres. Todo lo que Él hace es para nuestro bien.

Dios, en su infinita bondad jamás nos deja sin amparo.

¿ Alguien consigue imaginar cómo sería el mundo sin las cosas que Dios creó?. Sin agua, sin la naturaleza , no habría vida.

RECUERDOS

El mundo en el cual vivimos es propiedad de Dios.

Debemos dar gracias a las bendiciones de nuestro

Padre Celestial todos los días.

El corazón agradecido al Señor difunde la bondad

y la alegría en su nombre.

Jesús rendía gracias a Dios, ayudando al prójimo.

La naturaleza diariamente glorifica la Divina Bondad,

en la luz del sol, en la suavidad del viento, en el cante de las aves

y en el perfume de las flores.

Quien ayuda a las plantas y a los animales revela

respeto y cariño por la Creación de nuestro Padre Celestial.

Debo ser bondadoso con todos, porque

Dios ha sido infinitamente bueno conmigo, en todas las situaciones.

Quien trabaja con alegría muestra reconocimiento al Cielo.

Ayudando de buena voluntad con los demás, estaremos sirviendo a Dios.

En el canto de los pájaros, en el campo, en el mar,

en la flor, la vida está repitiendo: "? Honrado sea Nuestro Padre!..."

Xavier, Francisco Cândido. De la obra: Padre Nuestro. Dictado por el Espíritu Meimei. 19 edición Rio de Janeiro, RJ: FEB. 1999.